No se oyen ya sus risas, pero siempre veremos su luz

No se oyen ya sus risas, pero siempre veremos su luz

En este 2020 tan duro que hoy termina, en Amara tenemos un doble sentir. Por un lado deseamos que acabe, pero por otro nos gustaría poder dar marcha atrás en el tiempo y regresar al 1 de enero para poder hacer sonreír una vez más a los niños y niñas que nos han dicho adiós.
Siempre nos quedará un abrazo más por dar, siempre nos faltará otro rato que compartir… siempre en nuestro corazón.
*Este año esta publicación se la dedicamos también a todos los familiares y amigos que nos han dejado por la pandemia.